9/11/13

Show must go on

Vamos a ser optimistas. Vamos a dejar de lado los prejuicios y los problemas. Vamos a mirar el lado positivo.

-¿Un fin? ---->  Un principio.
-¿Una lágrima? ----> Un momento de reflexión.
-¿Un grito? ----> Una ocasión de desahogo.
-¿Una ruptura? ----> Nuevos amores.
-¿Un cambio? ----> Nuevas experiencias.


Todas las situaciones que vivimos día a día y que nos llenan de desasosiego y desesperación. Que nos provocan insomnios y quebraderos de cabeza. Me han llevado a averiguar una cosa: los humanos somos masoquistas. Nos encanta hacernos las víctimas y sufrir. 

¿Por qué no mirar las oportunidades que nos proporcionan las situaciones? ¿Por qué no alegrarnos de los cambios? ¿Por qué? ¿Por qué siempre nos centramos en las consecuencias que nos perjudican? ¿Por qué no en la que nos benefician? 

Ah, sí. Porque nos gusta ahogarnos en el dolor. Nos gusta saborear la amargura de las lágrimas. Nos gusta estancarnos en el pasado, olvidándonos del presente y marchitando el futuro.

La rosa te hirió. Te provocó una herida que en poco tiempo podría estar curada. Pero tú te niegas a que cicatrice. Profundizas en ella impidiendo que la piel se regenere y borre todo su rastro.

Sufres, lloras y sangras porque tú mismo quieres. Has decidido vivir en el pasado y marchitarás con el rencor y el dolor en tus venas.